Plaza Belisario Roldán, ¿una mejora?

Acaban de finalizar hace pocas semanas las labores del plan de “Mejoramiento de la Plaza Belisario Roldán”. Esta obra es muestra palmaria del grado de unitarismo del país y de dependencia de las administraciones municipales.

La “mejora”, con un presupuesto oficial de $395.195,00, consistió en reducir el espacio verde del que disfrutaban los vecinos, para construir en su lugar una dársena que permita estacionar en 45º a los vehículos que realizan trámites en la zona, la realización de un enrejado de los juegos de la plaza, de una altura aproximada de 0.50m, y unas diez farolas aproximadamente, ubicadas sobre la avenida 3.

Sin convocar a una audiencia pública a los vecinos ni a las entidades intermedias del barrio  para conocer sus opiniones al respecto, procurando una verdadera democracia participativa, se toman decisiones que afectan futuras generaciones, con el simple afán de demostrar que se está "trabajando" por la ciudad.

Es llamativo que en un país con un régimen de gobierno federal, la “mejora” de una plaza de pueblo es realizada con fondos de la Nación.

Deberian aplicarse dichos fondos en obras necesarias para la población y no dilapidarse dichos recursos en otras que nadie reclama ni necesita.

Dicha situación lleva a cuestionarme sobre la calidad de las personas que están al frente del gobierno municipal, y sobre los criterios y las prioridades que tienen para el desarrollo de la ciudad. Cuando en todo el mundo se procura tomar decisiones que afectan la calidad de vida y los intereses de los ciudadanos, en consenso con los mismos, aquí se opta por decidir arbitrariamente.

Por otro lado deja traslucir los pocos recursos que recauda el municipio, el mal uso e incapacidad para administrar criteriosamente los mismos, la falta de planificación, y el grado de dependencia y obsecuencia que tiene con las autoridades nacionales.